Manejar la vida con un recién nacido y un toddler
Si estás leyendo esto es porque tienes un toddler y un recién nacido o un bebé que está por llegar, y quiero darte todas las herramientas para lograr el GRAN TRIUNFO del reto que esto significa y animarte que estás haciendo un gran trabajo y que eres la mejor mamá para tus hijos.
Entendemos que cada bebé, cada hijo es distinto, tienen temperamentos y formas distintas y cada uno reta nuestra manera de maternar y paternar de manera distinta.
Es de suma importancia darle al bebé en camino su propia identidad, hablarle al hermano/a mayor acerca de la llegada de un nuevo bebé, hacer transiciones sutiles y lentas sobre cambios por ejemplo de cuarto, decoración y preparar el lugar al que llegará el nuevo integrante de la familia.
Cuando llega un hermano nuevo todo puede pasar, puedes tener todas las piezas y todo acomodado pero en realidad es como tirar un dado, cualquier resultado se puede dar, por lo que es importante relajarse fluir, no tratar de controlar todo y pedir ayuda cuando sea necesario.
Cuando llegues a casa, el bebé esté en el huevito, o en algún lugar seguro para que puedas abrazar a tu mayor.
Un dato curioso que nunca nos dicen es que llegas a casa y lo grande que se siente tu hijo mayor ahora es impresionante, parece que creció el día que estuviste en el hospital, siempre había sido tu pequeño/a, los piecitos, las manitas todo te parecía tan pequeño y ahora que llegas del hospital con ese bebé miniatura en brazos, abrazas a tu toddler y se siente taaan grande todo de el/ella se ve tan grande que no lo puedes creer.
El momento donde se conocen es un momento increíble como mamá, un gran tip que siempre puede ayudar es que el bebé le “traiga un regalo” a su hermano/a mayor puede servir como “ice-breaker”.
Todo pudiera parecer miel sobre hojuelas ó un “momento de honey-moon” y pasando esta etapa pueden existir momentos de celos, berrinches o rabietas y enojos, por muchos motivos pero uno importante es que no puedes darle en el momento lo que esta pidiendo y puede sentirse desplazado, presentando algunas conductas tipo “regresiones” a conductas de bebé para llamar nuestra atención.
Es importante también darle responsabilidades a su nivel para “ayudar” a mamá y papá con las labores nuevas del bebé, incluso de la casa.
Puede representar todo un reto para nosotras las rutinas, ir acomodando los horarios de ambos con las necesidades de cada uno, tampoco te frustres si las cosas no salen como tu querías o te imaginabas.
No debes presionarte que debe todo de funcionar igual que con tu primer bebé, no existe una única fórmula ni una única regla.
DATE TIEMPO, AMOR Y espacio también para ti, ten paciencia!
Es frustrante todos los cambios y arreglos que van sucediendo y es peor si tu no duermes, es importante poder tener alguna guía si no lo estás logrando tú por tú cuenta, hacer todas las actividades de un día, al llegar la noche no duermes y al día siguiente todo se pone peor por las deudas de sueño que vamos acumulando, y más si no tienes una consistencia en la rutina.
Es normal tener esta temporada de solo sentir que SOBREVIVES, siempre pasa, y en cuanto menos te des cuenta pasas esos meses retadores y ves un panorama distinto como equipo.
Generalmente antes o después de que llegué el nuevo bebé, hay regresiones en dónde los niños necesitan mucho ACOMPAÑAMIENTO, y contrario a lo que pensamos de intervenir lo menos posible, lo que necesitamos hacer es INTERVENIR Y ACOMPAÑAR, mucho acompañamiento para entender que todo va a estar muy bien
Lo peor que te puede pasar en esta etapa es tener 2 niños despiertos en la noche, nosotros te ayudamos a lograr que todos descansen y la llegada del nuevo bebé sea como de película con nuestro COACHING PERSONALIZADO, conoce más en el botón.
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